Cuba: los cambios no tienen nada que ver con un viraje al capitalismo, insiste Ricardo Alarcón

Ricardo Alarcón de Quesada

PATRIA GRANDE- Ricardo

Alarcón de Quesada, Presidente de la Asamblea Nacional de Cuba, concedió una entrevista al canal multinacional Telesur, donde confirmó que los cambios aprobados por el Congreso del Partido en Cuba no tienen nada que ver con un viraje al capitalismo, ni con transformaciones cosméticas dentro del propio modelo socialista cubano

"A nosotros no nos entiende ni la derecha ni la izquierda”-dijo Alarcón refiriéndose al hecho de que Cuba no se encaminaba en la dirección demandada por los neoliberales, en el sentido de que sus políticas nada tienen que ver con los ajustes aplicados bruscamente en países capitalistas. Al formular una pregunta sobre esas transformaciones, la periodista Patricia Villegas sugirió que la izquierda también evidencia temores y desconciertos por que Cuba corra un destino similar a lo que fue la suerte de la Unión Soviética.

“Precisamente el Congreso trató de cómo hacer para salvar nuestro proyecto socialista”- dijo Alarcón, quien añadió que en su país nadie quedará desamparado. “Tenemos que cambiar el viejo modelo porque había mucho igualitarismo, una libreta de abastecimiento con fuerte subsidio para todos los cubanos”.
“Ahora se tratará de subsidiar a las personas y no a los productos”- aclaró el Presidente de la Asamblea Nacional, quien subrayó que el modelo viejo es insostenible, máxime en un contexto internacional de aumento acelerado en los precios de los alimentos.
DESACRALIZAR A LOS TRABAJADORES POR CUENTA PROPIA
En otro momento de la entrevista, el Jefe del Parlamento cubano se refirió a la necesidad de remover obstáculos que impiden el desarrollo de los trabajadores por cuenta propia (así se llama en Cuba a quienes promueven iniciativas económicas de propiedad personal), a quienes consideró “actores legítimos de la economía cubana”.
Según Alarcón, entre las medidas que se instrumentarán figura el otorgamiento de créditos a los cuentapropistas por parte de la banca cubana. Los lineamientos de la política económica y social incluyen también la venta de materias primas en condiciones similares a las vigentes para las empresas estatales.
Respecto a la decisión de limitar a dos periodos consecutivos de cinco años los cargos principales, Alarcón admitió que la Revolución necesita rejuvenecerse y encontrar cuadros que sean capaces de continuar la tarea asumida por la generación histórica de salvar y perfeccionar el socialismo.
“Vamos hacia un socialismo renovador, profundamente cubano, con gran sentido de patria, protagonizado por todos los cubanos -comunistas o no” -concluyó.